La detención y enjuiciamiento de la expresidente de Bolivia, Jeanine Áñez junto a sus ministros y algunos integrantes de la fuerza pública, provocó una fuerte reacción de la Conferencia Episcopal, el pasado 15 de marzo.
“No podemos permanecer pasivos, mientras se persigue a ciudadanos que han servido a Bolivia, con sus limitaciones, en diferentes momentos de su historia y buscando caminos de pacificación“, se lee el comunicado.
La Iglesia solicitó a las autoridades que trabajen por el progreso del país, porque la política de la revancha y una justicia dependiente del poder político; no crean confianza en la gente y en cualquier momento perjudicará a los bolivianos. Así los obispos exigieron la libertad inmediata para los detenidos en respeto al debido proceso, aspecto que forma parte de los derechos fundamentales reconocidos internacionalmente.
Asimismo, advirtieron que al no tener en cuenta las garantías mínimas constitucionales ni siquiera respecto a la presunción de inocencia, es lamentable confirmar que el sistema judicial boliviano deja impune a unos y criminaliza a otros, dependiendo de quien ejerce el poder político en cada momento.
Dirigiéndose a sus compatriotas los invitaron a la reflexión a mirar el futuro con esperanza en la búsqueda de un país reconciliado y en paz. Igualmente recordaron que solo hay democracia si se respeta la independencia de la justicia y no se somete al interés del Gobierno de turno, porque una de las bases de la democracia es el respeto a la verdad y no se puede crear un relato falso de la historia, manipulando la conciencia de los bolivianos e inventando una verdad complaciente con las aspiraciones de un grupo político.
“Cuando se actúa en forma arbitraria, violentando la verdad, la democracia se muere y el ejercicio del poder se convierte en imposición que en cualquier momento perjudica a toda la sociedad“, señalaron.
Finalmente la Iglesia reiteró su deseo de servir al pueblo propiciando el diálogo y buscando la paz, proponiendo soluciones en las que siempre se tenga en cuenta a todos más allá de las diferencias políticas.
Fuente: Celam
Deja una respuesta